miércoles, 12 de abril de 2017

No quiero morir sin antes haber amado, pero tampoco quiero morir de amor







16. EL FERVOR (YÜ)
Entusiasmo. Se preparan novedades halagüeñas. Nuestros actos se verán coronados por el éxito si no exageramos y nos volvemos demasiado optimistas y enfervorizados. Se aconseja tomar la iniciativa, pero es importante mantener la reserva y la discreción. El que obtenga este hexagrama tendrá éxito en las actividades que se refieran al espectáculo.
Lineas Móviles:
2) No conviene ilusionarse antes de tiempo: nuestra mente debe ser firme y sólida, no debe inclinarse al error.

3) Es difícil escoger el momento justo para actuar: se pueden adelantar los acontecimientos a causa de un entusiasmo excesivo o retrasarlos a causa de indecisión.

6) El entusiasmo nos ciega y nos engaña. Si nos damos cuenta aunque sea en el último momento tendremos posibilidades de salvarnos.







50. EL RECIPIENTE SACRIFICIAL (TING)
Este es otro hexagrama simbólico: el recipiente sacrificial contenía en la antigua China los alimentos. De aquí la idea del sacrificio y de la alimentación espiritual. Nutrir el propio espíritu y saberse sacrificar por el bien común son las llaves del máximo éxito, del alcance de la madurez. Todo hombre posee un destino preestablecido: es preciso tener fe en la voluntad divina.